Al menos tres episodios lamentables en lo policial se vivieron en las últimas 48 horas en las dos ciudades más importantes del departamento San Jerónimo. En Gálvez una mujer mayor fue brutalmente golpeada por delincuentes cuando le ingresaron a robar en su propia casa.
Por su parte, en Coronda se registraron dos hechos muy graves. Un vecino de la propia Comisaría -vive a 50 metros- contó que ingresaron a su casa y le robaron un televisor, 7.000 pesos y 20.000 dólares. El hombre ya habría sufrido unos seis o siete episodios similares y pide por mayores controles en la Plaza Urquiza.
En la tierra de la frutilla el episodio más grave lo vivió una familia que vive por Roque Saenz Peña y Santo Tomé a unos 500 metros de la Cárcel. Cuando una mujer llegó de trabajar fue tomada de rehén junto a su marido y una pequeña de siete años por dos hombres y dos mujeres que se llevaron todo lo que tenían a su alcance, entre ello, dos motos y un equipo de música.
Un vecino, luego de recibir el grito de alarma, salió a su busqueda y sólo pudo encontrar tirado uno de los rodados. Luego de ser desciptas las personas que perpetraron el ilícito las dos mujeres fueron detanidas pero los hombre permanecían hasta hoy, prófugos. Lo más llamativo es que la víctima fue a aportar una prueba -un encendedor- para que la policía pueda tomar huellas y se encontró con la sorpresa de que justo en ese momento las ladronas eran liberadas.
Marcha en Gálvez