Mediante una seria de requisas llevadas a cabo por la Secretaría de Asuntos Penitenciarios, se secuestraron en Santa Fe más de 500 celulares en las cárceles.
Detalladamente se confiscaron 513 teléfonos celulares, además de 187 chuzas, 50 litros de cachuña, bebida hecha a base de frutas fermentadas de manera artesanal y que emulan a bebidas alcohólicas.
Las requisas tienen el objetivo de hallar dentro de las cárceles elementos prohibidos, pero, sobre la telefonía celular en particular se sospecha que es utilizada por los narcos para poder continuar con las operaciones criminales.
Estas requisas se complementan con el trabajo que se lleva a cabo con las visitas de allegados a los detenidos, donde ya se llevan incautados 46 celulares y medicación no autorizada.
Por su parte, el secretario de Asuntos Penitenciarios de Santa Fe, Héctor Acuña, manifestó que "hay una decisión política de cumplir con la ley" y reveló que "hoy el Servicio Penitenciario está en emergencia, hoy tenemos 900 internos de más, yo tengo celdas donde viven dos o hasta tres internos".
Respecto a los más de 500 celulares incautados: "Es poco porque hay 6660 internos aproximadamente, faltan por lo menos 2800 celulares. Tiene que haber una decisión política para avanzar, la política actúa espasmódicamente”.
En tantoo, el funcionario también se refirió a la situación actual de las cárceles en la provincia: "Se tienen que ver los patios penitenciarios y cómo viven los internos, por eso vamos a construir plazas penitenciarias y lugares para amamantar. Si yo no refuncionalizo a los internos, puede existir la reincidencia“.
Y para finalizar, reconoció que “la gestión anterior trabajo mucho en los talleres, se mantuvo la industria penitenciara con el IAPIP. Cuando se gobierna no se erra en todo, por eso se tiene que seguir en marcha. Se debe reconocer lo que se hizo y poner ahínco en lo que hay que hacer”.
