“¿Tu hijo se empachó? No vayas al médico, andá de Herminda”
Desde hace años que la psicología ha descubierto el poder del “efecto placebo”, que confirma que el pensamiento y la fe, puede generar consecuencias según aquello en lo que nos enfocamos. Según la mayoría de los habitantes de la localidad de San Carlos Sud, existe una señora llamada Herminda que cura a la gente.
Si alguien pasa por la casa de Herminda, lo que más llama la atención es la cantidad de personas que hacen cola para esperar ser atendidos. Los motivos son múltiples: curarse el empacho, la asoleadura, el “mal de ojo”, etcétera. En el zaguán de su casa, tiene una enorme cantidad de portarretratos de los bebés que curó de diferentes enfermedades.
En caso de no poder acercarse hasta la su casa, Herminda cura por teléfono, y ofrece algunos consejos para que la sanación sea más rápida. Además, vende huevos caseros, de los de antes, esos que tienen la yema más amarilla y, por supuesto, otro sabor. Muchos matan dos pájaros de un tiro; se curan el empacho y se hacen una tortilla con los huevos de Herminda.
